lunes, 3 de enero de 2011

PUNGUISTAS En la Línea D de Subtes de la Ciudad de Buenos Aires.

HAY PUNGUISTAS
Señores Gobernantes.
Autoridades de Metrovías SA
Autoridades Policiales
Vengo de hacer un viaje en la línea de Subte D en dirección a
Congreso de Tucumán hora 11.30 AM me siento muy triste pues
me tocó ser testigo al igual que a otros pasajeros de la
acción de cuatro punguistas, subieron unas tres estaciones
antes de Plaza Italia donde bajaron todos, apretaron a un
pobre viejo contra la puerta donde se encontraba distraído y
le sustrajeron 140 pesos del bolsillo la impunidad con que
accionan me superó, solo le pude dar un codazo a un joven que
tenía sentado a mi lado de origen Africano, se lo hice notar,
¿me dijo le están robando?, todavía podíamos hacer algo, pero
no, todos quedaron y quedamos inmovilizados yo me encontraba
sentado a las espaldas de los punguistas, muy corpulentos
ellos en camisa, uno hace que marca o lee mensajes del
celular para distraer la atención, los otros hacen de tapa
menos el ejecutor que es pequeño y lleva un bolso colgado
color gris del lado exterior y negro interiormente y mete su
brazo por dentro del mismo lo lleva sobre el pecho, el
bolsón le sirve de apoyo y tapadera, de tez cetrina, de unos
35 años pelo corto color castaño, se nota que se mueve muy
seguro impune a todo y a la vista de todos creadme.De nada
sirve el *31416 nadie lo puede usar si está cerca de la
escena, deberían poner pulsadores de acción retardada (con
sesenta segundos de diferencia) y una campanilla potente en
cada vagón muy cerca de todas las puertas a un 1,10 de
altura, o en los barrales que están junto a los asientos al
hacer sonar la campanilla ante la presencia de los
Punguistas u otros hechos delictuosos, alertaría a todos
los Pasajeros, primero se debería hacer una campaña de
concientización. Este método permitiría alertar sin ser
descubierto y sin poner en riesgo la propia vida.
Cuando bajaron los cuatro y recién el anciano tomaba
conciencia de lo que le había sucedido, el hombre que se
encontraba de frente y vío todo, de mediana edad, se
hallaba tranquilo y lo tomó como un hecho natural en el
que no debía intervenir.
Escuché sí, hablar en la ocasión de navajas.
Son las 18 horas, ustedes no pueden llegar a imaginar lo mal
que estoy.
Juan Carlos Vidal
31/12/2010

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